Con frecuencia oímos al Papa Francisco dando un gran valor a la familia y la importancia que tiene para reforzarla “pasar ratos perdidos” disfrutando juntos. Los religiosos aplaudimos esta idea del Santo Padre y, con nuestras limitaciones, intentamos también tener estos “tiempos perdidos” con toda la familia de religiosos/as que vivimos en la Isla de Menorca.
El sábado 25 de junio, fue uno de estos días. Pudimos reunirnos 22 religiosos/as en el puerto marítimo de Mahón para ir a visitar la Isla del Rey. ¡Cómo disfrutamos de su encanto y belleza! Justo al llegar fuimos a la capilla para dar gracias a Dios con la celebración de la Eucaristía.
La visita nos la dirigió el general Luis Alejandre con la ayuda de dos voluntarios a quienes tenemos que agradecer su buena acogida y sus detalles explicativos. ¡Qué gran labor han hecho y siguen haciendo los voluntarios en esta Isla del Rey! ¡La están dejando preciosa! Reconocemos su trabajo desinteresado que hacen cuidando la casa común, que es la naturaleza y que tanto se habla hoy día.
Pasamos la mañana en la isla del Rey. Después nos dirigimos hacia Es Castell, donde pudimos compartir una buena paella, en la casa parroquial que nos acogió con todo cariño. La jornada festiva se “acarameló” con algunas anécdotas y chistes espontáneos de los presentes. Ya, al final, no podían faltar las fotos del momento que quedan como recuerdo feliz del día.
Con la despedida y la ilusión de que se repita y hasta la próxima si Dios quiere, fuimos desfilando cada uno a su comunidad local. “Mirad cuán bueno y hermoso es convivir los hermanos juntos en armonía.” (Salmo 133)
CONFER Menorca
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